Molestias

     Últimamente he tenido bastantes problemas con los entrenamientos de running. Desde el lunes de la semana pasada hasta ahora me he resentido de una sobrecarga en el músculo sóleo, cercano a los gemelos.
Creo que ha sido por el calzado, uso unas zapatillas bastante viejas como para correr con ellas todos los días y durante tanto tiempo.. pero no estoy muy seguro, quizás sea el terreno o a lo mejor simplemente se deba a que nunca he corrido tanto en mi vida.
     Sea como fuere, después de este fin de semana sin correr, creo que se ha suavizado bastante, y contrastando con el viernes pasado que me tuve que retirar a los 5 minutos, hoy he podido completar 41 minutos en las pistas, espero que esto solo vaya a mejor ya que temporalmente no tengo acceso al gym.

   Este finde he estado en Cuenca, el viernes llegué a la estación del AVE de Cuenca a las 16.00 y me fui directamente al club para entrenar, unos 12 km. con el grupo de seniors en los que sufrí demasiado para ser un "paleo continuo" lo que tocaba.
    El sábado estuve todo el día en el Polideportivo San Fernando con 9 personas más, dando clases para poder conseguir el título de auxiliar de árbitro de piragüismo... aprobados los examenes lo conseguí.
   El domingo entrené por la mañana con el grupo de cadetes dado lo exigente del entrenamiento y la imposibilidad de poder realizarlo en condiciones con el grupo de seniors. Los músculos este día no daban mas de sí, no entiendo el porqué pero fueron series de velocidad que me pasaron factura.

Primeros entrenamientos en el Campus de Vera

     Llevo una semana entrenando en las fantásticas instalaciones deportivas de la Universidad Politécnica de Valencia: un gimnasio más o menos amplio y unas pistas de atletismo me permiten poder llevar a cabo los entrenos de una forma bastante cómoda.

     Nada más salir de clase me acerco al vicerrectorado de deportes y dependiendo del día hago una sesion de (1h-15-30 min. de gym+40 min. de running) u otra de solamente (45 min. de gym+40-45 min. de running). Digo dependiendo del día porque mis clases comienzan a las 8.00 de la mañana y terminan a las 12.15 ó 14.15 dependiendo de si tengo o no prácticas de laboratorio, así que los días que salgo a las 14.15 no puedo estar 2 horas entrenando ya que hago el ejercicio sin haber comido, no puedo terminar a las 5 de la tarde.

     Este segundo cuatrimestre quiero centrarme más en la parte de ejercicio aeróbico (el running) ya que el pasado lo dediqué casi exclusivamente al gym por lo que gané en fuerza pero perdí gran parte de mi resistencia aeróbica, esto lo noté los primeros días que pasé entrenando en el río este invierno, no era capaz de aguantar en sesiones que se alargaban mucho en el tiempo, sin descansar. Por todo esto quiero correr todos los días un mínimo de 40 minutos en las pistas de atletismo.

     En las siguientes entradas del blog intentaré colgar los resultados de los entrenamientos registrados con el pulsómetro.

Vuelta a Valencia

Ha pasado mes y medio más o menos desde que empecé a entrenar de nuevo con mis compañeros en Cuenca. Ha sido un tiempo durillo aunque ya lo echaba de menos. Al principio me costó bastante integrarme al grupo, los casi 4 meses que habia estado sin entrenar encima de una piragua se notaron mucho (aunque no era algo que no esperara). Comencé con entrenamienos de unos 12 km. a paleo continuo con un ritmo suave para volver a recuperar las sensaciones y, sobretodo, la forma de remar; el piragüismo es un deporte muy condicionado por la técnica de paleo, la cual se pierde muy rápido si no entrenas con regularidad por lo que he querido sobretodo centrarme en ese aspecto. El volver a recuperar el fondo era cuestión de entrenar todos los días e ir sumando kilómetros y tiempo encima de la piragua. Los entrenos en el gym me han sido más llevaderos por haber sido prácticamente mi único ejercicio en Valencia y haberlos trabajado bastante.

Estos últimos días han sido entrenamientos que seguían la tónica de todo el invierno, series de velocidad con el ácido láctico hasta el cuello, gym y un poco de carrera por los paisajes de Cuenca. La verdad es que he notado un gran cambio desde que empecé a entrenar hasta ayer, que fue cuando terminé el ultimo día de trabajo en el río; conseguí recuperar bastante la técnica perdida y a nivel de fatiga, la progresión ha sido muy grande también.

El último día acabé un poco quemado porque, si el entrenamiento era de por sí muy duro, Alfonso tiró la última serie a muerte cuando era un R.III lo que tocaba pero bueno... no seríamos piragüistas de Cuenca si no hicieramos ese tipo de cosas jaja. (Topo cabrón, al final me has hecho ponerlo)

Hasta que vuelva a entrenar en serio allá por Junio, voy a echar de menos las batallas campales en las ciabogas, los tirones de Javi y sus piques cuando le damos puntazos, los "tonto polla!" de Alberto, las manoplas de Rafita, el catarro anual de Alfonso, la risa de deficiente de Lucia, las tramas del Topo y sus dialogos con Carlitos por su sitio en el banco del vestuario, las "montoyas", el "Roberto Carloos ♪" de Enrique y sus imitaciones de Chiquito de la Calzada... en fin, muchas cosas por las que realmente merece la pena sufrir remando todos los días ;)

Fin de semana gélido

El pasado viernes por la noche estuve en Valencia una vez más para acudir al concierto que daba Skyline, el grupo de mi amigo Victor, un compañero de la universidad. La verdad es que estuvo genial, eligieron canciones que me gustaban y han mejorado desde la última vez que les vi (quizás sea por el nuevo batería, eh Miralles?.. jaja).

Acabaron muy tarde, a las 4 de la mañana llegué a la casa de mis abuelos en Paterna para levantarme a las 7 y poder coger el Ave a Cuenca que salía a las 8.00. Dormí prácticamente 3 horas y nada más llegar a Cuenca fuí al río para entrenar con el grupete. Me encontré con un frío que no había sentido desde hacía mucho tiempo: a las 11 de la mañana pudimos estar remando sobre los 0º... lo bueno es que remamos también con los k2 cadetes, 10 km en 48 minutos aprox. que se hicieron más amenos.

El domingo hizo más frío aún si era posible, las orillas estaban congeladas asi que os podéis hacer una idea de la temperatura que hacía. El entrenamiento me costó bastante, series a un R.II (70%-80% del esfuerzo máximo) y estuve a punto de retirarme por unas rozaduras que el chaleco impermeable me estaba haciendo en el cuello y porque el frío me habia resecado tanto la cara que al contacto con el sudor parecía que me estaban arrancando la piel a tiras. Finalmente conseguí acabar con buenas sensaciones aunque fue un día muy duro.

Ayer lunes tuvimos sesión de fuerza general en el gym y después 40 minutos de carrera por Cuenca en los que me encontré muy cómodo, aunque Javi hizo que me pusiera a una máxima de 183 ppm.

Seguimos entrenando

Comienza a volverse un poco aburrido el tener que actualizar el blog, pero ante las bromas de mis compañeros de equipo creo que intentaré escribir un poco más a menudo jeje.

Estos últimos días han estado marcados por un frío más intenso que los anteriores, de hecho no había pasado tanto frío desde los entrenamientos de invierno de la temporada pasada. A pesar de eso, las ganas de volver a entrenar me han ayudado a aguantar estos entrenamientos, para mí, más duros que los que acostumbraba en Valencia, debido al clima principalmente. Irónicamente ha sido estos días cuando he dejado colgadas definitivamente las manoplas ya que hace tanto frío que llega un momento en el que no sientes las manos y ya ni sabes que temperatura hace fuera jaja.

Los entrenamientos han sido principalmente series explosivas (50m, 100m, 200m...) con ritmos R.IV, R.V y R.VI en las que hemos llegado a llevar un pequeño freno, series más largas ya sea por distancia (500m y 1000m) o por tiempo (2', 4'...) con ritmos R.II y R.III, y sesiones de gimnasio en el polideportivo del Sargal. Personalmente me encuentro muchísimo más cómodo en este tipo de entrenamientos, desgastan mucho pero también te permiten tener muchos descansos entre serie y serie, la fatiga psicológica, a mi parecer, es mucho menor que en entrenamientos de paleo continuo durante 16 km que se hacen aburridos e incluso más duros aunque el ritmo sea mucho más tranquilo... el piragüismo es un deporte en el que la mente juega un papel importantísimo, si la cabeza no puede, el cuerpo no responderá, por eso es importante llegar motivado a entrenar e intentar no venirse abajo en los entrenamientos pensando en todo el tiempo y la distancia que te queda por delante. Esto último es algo que había olvidado casi por completo y que realmente ayuda en muchos aspectos de la vida que nada tienen que ver con el deporte, a la hora de estudiar en la época de examenes de la universidad, el piragüismo me ha ayudado más de lo que mucha gente pueda pensar.

Estos últimos días he fallado a 2 ó 3 entrenos ya que he hecho dos viajes, uno a Valencia y uno a Madrid. Los que he faltado he intentado sustituirlos por 30' de carrera por la mañana prontito ya que es el único rato que tenía libre esos días, aunque solamente un día de los tres he conseguido vencer la pereza de salir a correr las 8 de la mañana.

Las sensaciones van mejorando cada día más, me encuentro mucho más cómodo en la piragua y he conseguido acoplarme al grupo de juveniles y seniors casi por completo, es una lástima que dentro de una semana tenga que regresar a Valencia y volver a los entrenamientos de gym y running.

Viaje de esquí

Hace dos días volví de Andorra después de pasar 5 días junto a mis compañeros de piragüismo en las pistas de Vall-Nord. Ha sido un gran viaje que creo que todos hemos disfrutado muchísimo a pesar de que las pistas no estaban en tan buen estado como el año pasado.

Tenía ganas de volver a cojer la tabla: deslizarte a toda velocidad cuesta abajo oyendo cómo los cantos rascan la nieve, grindar en un snowpark, saltar, explorar las fuera-pistas... todo ello transmite sensaciones que muy difícilmente se pueden consegir en otros deportes, es una gran descarga de adrenalina que de paso viene bien para desconectar del piragüismo que día tras día puede volverse muy pesado.

Me puse el pulsómetro para averiguar como respondía el cuerpo mientras esquiaba y me sorprendió la cantidad de calorias que quemé solo en un día: 1209 kcal. en una sesión de mañana y 1063 kcal. por la tarde, alcanzando unas pulsaciones máximas de 180 ppm. cosa que me sorprende ya que remando sólo llego a ese umbral cuando realizamos series a un ritmo muy intenso y muy rara vez las alcanzo, quizás sea por el subidón que da esquiar jaja.

Ayer volví a entrenar en el río junto con el grupo de seniors ya que tenían un entrenamiento de series de velocidad (200 metros y 1000 metros) y en ese tipo de entrenamientos sí que soy capaz de mantenerles el ritmo (más o menos). Empecé sufriendo mucho en los 200, parecía que iba a echar la comida en cualquier momento así que tendre que ajustarme mejor las comidas para que cuando entrene ya tenga la digestión hecha.. En los 1000 metros me sentí mucho más cómodo, sólo me quedé en el primero que tiraba nuestro entrenador... Parece que poco a poco voy recuperando lo perdido estos meses en Valencia.

Primeros entrenamientos del año

He comenzado el nuevo año con más ganas de entrenar y con el deseo de que estos los entrenamientos den sus frutos hacia el verano.

El día de Año Nuevo descansamos (aunque no me hubiera sorprendido nada si nos hubiera tocado entrenar ese día también) y por lo tanto empecé con el trabajo el día 2, día en el que todos realizaron entrenamientos relativamente cortos 40-50 min. por lo que no pude entrenar el mínimo que me habia impuesto impuesto (12 km diarios), solo pude completar 8 km en 41 min, con molestias en los brazos todavía de la semana anterior.

El día 3 me levanté a las 7.45 y me fui a correr en ayunas por Cuenca con mi amigo Dani, a 0º grados, parece que ya me estoy acostumbrando a la temperatura invernal de Cuenca, tan diferente a la de Valencia. Recorrí 5 km aproximadamente en 27 minutos a un ritmo tranquilito ya que esa misma tarde volvi a entrenar en el río, 12 km en 1 hora 1 min. que se me hicieron bastante pesados pues tuve que realizarlos en un tramo de apenas 1000 metros de longitud, aunque acabé con muy buenas sensaciones.

Hoy he entrenado con el equipo de seniors ya que tenían un entrenamiento asequible para mí, 12 km a ritmo tranquilo (aunque todos conocemos ya el ritmo "tranquilo" de nuestro entrenador Javier Morillas), con un pequeño freno que se ponían y quitaban cada 1000 metros. He empezado sufriendo y un sprint después de una boya en el km 8 casi acaba conmigo, aunque he conseguido aguantar y terminar el entrenamiento con un buen sabor de boca.
Despues hemos hecho 3 salidas de 100 metros y la verdad es que me encuentro muy agusto cuando se trata de velocidad, parece que el gimnasio de Valencia ha hecho efecto.

Mañana me voy a Andorra con mis compañeros del club, 5 días de esquí que seguro disfrutaré :)
Usaré el pulsómetro ya que tengo curiosidad por saber como se comporta mi cuerpo en un deporte como el snowboard.
Feliz año nuevo a tod@s!